Independiente ha vivido una jornada increíble. Difícilmente pase al olvido el 18-12-2011. Ese día el socio del rojo le ganó a su propia historia electoral. Record de votantes (y eso que no era un día de partido). El asociado se llevó un diploma moral por su alto grado de compromiso; tomando nota de la grave situación por la que atraviesa, desde hace ya un tiempo, su querido club y acudiendo a las urnas brindando un apoyo masivo. Javier Cantero, candidato por Independiente Místico se impuso con el 59,96% de los votos; allá a lo lejos quedaron Baldomero Álvarez (35,32%) y Juan Torres (4,52%). Fue una verdadera paliza electoral; un gancho a la mandíbula que terminó en K.O!
¿Quién fue el padre de la derrota? Julio Comparada, sin lugar a dudas. Baldomero Álvarez es una persona sin historia dentro de la vida política roja, por eso entiendo que endilgarle la derrota a su figura sería injusto, y más aún si se toma en cuenta como se dio su candidatura…la repasamos brevemente: a poco más de un mes para los comicios, un Comparada desesperado por unas encuestas que le daban la espalda, va en busca de un hombre con trayectoria en la política nacional/municipal; lo que el ahora ex presidente jamás pensó cuando lo fue a buscar a Cacho, era lo que vendría después; una vicepresidencia 1era que terminó convirtiéndose en su salida definitiva del trinomio por ser “piantavoto”. Hasta el día de hoy, Comparada no lo puede digerir. Y no lo culpo, vivió rodeado de obsecuencia (dirigencial y periodística), no tuvo rivales de peso ni en la oposición ni dentro del propio oficialismo. Independiente desde 2005 hasta hoy fue un club netamente “Presidencialista”; el 90% de las decisiones pasaban por las manos del jefe. Todo el mundo se encolumno detrás suyo y de esa manera gobernaron al club durante 2 períodos que resultaron nefastos. Hasta que el socio dijo BASTA!
Basta de una conducción sin rumbo;
Basta de constantes papelones deportivos;
Basta de un pasivo impresionante;
Basta de promesas incumplidas (por ejemplo con el Estadio y con acreedores);
Basta de manejos poco claros;
Basta de una barra brava enquistada en el club que agrede al hincha genuino;
Basta de incorporaciones mediocres. Basta de todo!
Y por eso varios dirigentes de peso se fueron de la sede social de Avenida Mitre 470 por la puerta trasera del gimnasio Bottaro casi en puntas de pie para no hacer ruido, con los votos a medio contar. Ah! y dicho sea de paso, Julio Comparada no se hizo presente al acto electoral. Era el papelón que le faltaba…seguramente todavía le duraba “el cansancio” que lo alejó de la vida política del club.
Javier Cantero y “los místicos” necesitaran tiempo para enderezar un barco a la deriva, paciencia para conocer el club, apoyo para la toma de decisiones y mucha suerte, por sobre todas las cosas, para que puedan cumplir todos los objetivos trazados. La gente está de su lado, y la oportunidad es inmejorable. Exitos!
